Metro

Tengo una obsesión con encontrar gente triste en el metro, y el lunes fue el climax:

Venía yo tranquilo algo liado buscando unos teléfonos en mi computador, cuando de pronto veo a una chica, alta y guapa, que cuando ya llegaba a la estación de mi casa casi se desmaya, me ofrecí a ayudarle a bajar del metro, y la lleve a las oficinas de la estación desde ahí, mientras ella “perdía el conocimiento”, llame al que ella decía que era su marido, el tipo algo enojado me contó que venía un par de estaciones delante de nosotros.

La chica me decía que esto le pasaba cada vez que tenía un problema, y claramente estaba en dicha situación. Luego de un rato, hable con su “marido” al cual consideré un imbécil. Y me fui cuando el estaba por llegar.

Al día siguiente pase por la estación y le pregunte al guardia que había pasado con la chica, me dijo que era todo mentira, que al momento de llegar el “marido”, ella se había parado y dejado de convulsionar.

La comprobación empírica de mi teoría se deshizo.

Últimamente estoy extrañando a demasiada gente, es horrible no dejo de pensar en personas que siento demasiado cercanas pero viven en continentes o mares distintos.

C´est la vie

En este momento voy en un taxi, camino a una cena.