En mi trabajo las cosas estas medio esquizo, pasamos de la euforia máxima a la depresión extrema en cosa de minutos. Y es imposible que estas cosas no me afecten a mí. En fin, gajes del oficio.
Dormí todo el fin de semana, y no se porque tengo tanto sueño. Tengo que ir a un par de doctores, pero me da una lata gigante = dentista y oculista. Junto con eso DEBO aprender a manejar.
Apenas tenga la oportunidad me comprare “El Muro” de Sartre, lamentablemente creo que ya perdí la edición de “La Nausea” que tenía. Hace un tiempo mi madre, tenía un amigo moribundo, y me pidió algunos libros, para prestarle, le pase:
- La Nausea, Sartre
- De Ángeles y Gorriones, Teillier
- Altazor, Huidobro
Creo que fue un buen préstamo para un moribundo, aunque dudo que algún día pueda recuperar aquellos libros, creo que si alcanzó a leerlos, aquella perdida no estuvo tan mala.
1 comentario:
Publicar un comentario